La locura del silencio, el delirio que produce la incertidumbre, la fría duda que, como de costumbre, desafía a la razón y al pensamiento congelando el tiempo, congelando el momento. Sigo sin entenderlo, las preguntas se quedan grabadas a fuego y sangre, arde mi mano buscando una respuesta, escribiendo ríos de letras, malgastando tinta. Arde mi garganta cuando grita buscándote. Arde mi corazón cada vez que late pero...
Mientras tanto un reloj suena, la banda sonora de mi vida. Cierro los ojos, lo escucho mientras pienso y espero...
...no la encuentro, la respuesta continúa en blanco.
Mientras tanto un reloj suena, la banda sonora de mi vida. Cierro los ojos, lo escucho mientras pienso y espero...
¿A qué espero?
¿Me espero a mí?... TIC... ¿Te espero a ti?... TAC...
Camino, pero no avanzo, siento que no me muevo, abro los ojos y observo el lento descenso de las agujas, suave, pero pesado. Miro al reloj, quizás él me de las respuestas que busco, le hablo, me callo, le escucho.
...TIC..., ....TAC....
Sigo atento a lo que dice, pero no me fío, cada vez que se mueve dice algo distinto y al final, ¿Para qué? Para acabar siempre en el mismo sitio. La respuesta sigue en blanco.
Me desespero, solo busco una puta solución.
Cada TIC es un alfiler que se clava en mi mente. Duele. Me dice " olvida, no pienses, actúa, deja que fluya y avanza... no pierdas el tiempo".
Cada TAC es una nube que llora ideas, un diluvio de posibilidades, matices, me dice " espera, no te precipites, jamás es demasiado tarde"
¿Jamás?
No encuentro la respuesta, la salvación a esta condena de querer saber y no poder encontrar el termino medio, ¿ Lo hay?
¿Lo hay para mi?... TIC... ¿Lo hay para ti?...TAC...
De tanto esperar el reloj dejó de sonar.
Qué bien escribes.
ResponderEliminarSe quién es tu admiradora secreta!
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