Y si...

Todo empieza con la soledad y su silencio,

la necesidad de pintar de nuevo un lienzo,

lleno de tropiezos, grises, tachones, hastíos,

decisiones, que dejaron este pecho tan vacío.

Quitarle lastre a esta cruz autoimpuesta,

esa que tú alimentas y cada uno lleva a cuestas,

siempre a cuestas y cuando es demasiado grande,

la orquesta de mis pies toca el vals de los cobardes.

Escapo de voces que dicen que todo está bien,

pensamientos atroces que devoran mi sien,

y sientes que vives en un perpetuo ocaso,

un rastro de lirios negros, delirios y fracasos.

Escapo a mi mente, este palacio opaco,

donde por un instante abrazo y mato

lo que soy por lo que quiero ser,

a donde voy hoy por el mañana y el ayer.

Muchas veces es para saciar el ego,

escapar al miedo cuando me sentí de menos,

cuando dices puedo,

pero estiras las manos y se escurre entre los dedos.

Y así me convierto en lo que son mis referentes,

robo sus versos eso que les hizo diferentes,

aquí conocen mi nombre y cual es mi sitio,

mirándoos desde lo alto de este precipicio.

Aquí soy libre lo que dura una canción,

aquí ser el mejor no es una opción,

soy batman salvando siempre la ciudad,

aquí todavía importa algo la verdad.

A veces imagino algo menos ambicioso,

 más personal, menos pretencioso,

repito la misma pregunta con distinto final,

dime: ¿Y si pudiera volver a empezar?

¿Y si no la hubiera conocido?

si dejara de buscarle a todo algún sentido

¿Y si hubiera nacido en otra cuna?

si dejara de vivir persiguiendo a la luna.

¿Y si no se hubiera ido?

¿Y si hubiera dicho vete por donde has venido?

a la mierda, hasta aquí, es suficiente,

adiós espero que tengas suerte.

Imagino miles de mundos paralelos,

diferentes acciones y errores, bajo el mismo cielo,

me preocupo más de lo que pudo ser un día,

que de la única vida importante, la mía.

Vidas tan ficticias como vuestra red social,

al final todo se resume en aparentar,

escapar al complejo, la diferencia entre tú y yo,

es que yo huyo de mis miedos en silencio.

Sabes, debería tolerar mejor el dolor,

dejar de preocuparme tanto por mi alrededor,

debería centrarme en mi, fluir, ser más feliz

debería...

pero siempre me acabo preguntando ¿y si...?

Y si...

Y si...