jueves, 23 de abril de 2015

Dime

Dime que no has temido tomar decisiones,
temor a hacer más grande y dolorosa la lista de errores,
darte cuenta de lo que dejaste escapar, temor a que no haya vuelta atrás,
a no arriesgarse y que la oportunidad no vuelva a aparecer jamás.

Dime que nunca has esperado más de alguien eh,
no me ves, pero no me aparto de tú lado, solo ¡mírame!,
pregúntame por qué no brillo, por qué callo, por qué aparto la mirada,
por qué digo nada, nada, no me pasa nada

mientras sangro pájaros muertos, lloro negro, grito miedo
te pido en secreto un gesto, un abrazo, que me salves de mi ego,
del naufragio, de las dudas y el fracaso, que por favor hagas algo,
antes de que las palabras mueran en mis labios dejando este sabor amargo,
de saber que te irás sin saber lo que estoy pensando.

Dime que nunca te has quedado quieto delante del espejo,
y has odiado al desconocido que dice ser tú, vivir debajo del pellejo,
le odias porque mira sin complejos, enumera uno a uno todos tus secretos,
le odias porque ves reflejada en su imagen todos tus defectos.

Te recuerda que desprecias una parte de ti mismo, le culpas por quitarte la careta,
le insultas, te ahogas en reproches harías añicos el espejo para que el sentimiento se escapase por las grietas,
eso o introducirte en el cristal, cambiar los papeles,
por una vez ser tú el que pregunte "¿Qué es lo que ves?".

Dime que no has sentido el pánico a no encajar, a la soledad y sus colores,
pánico a defraudar, la necesidad de ser alguien que no eres,
de arrancarte la tez y huesos a pedazos, esconderte dentro, crear un personaje,
a base de sonrisas, de palabras que son maquillaje,

de trajes, disfraces, de capas que te cubren y el engaño cada vez más grande,
y en el centro tú, más y más pequeño, insignificante,
esperando a tener valor, a que sea un sueño, a que vengan a salvarte.

Dime que no has culpado de tus problemas a todo el mundo menos a tí,
vamos dime que nunca lo has hecho, porque yo sí...

Sabes

Si me pinto en la espalda alas para volar,
no es por soñador, es por cobarde,
si soy laberinto, si levanto un muro entre tu y yo es para evitar
que me busques, que puedas encontrarme.

Porque no, no pienso como ellos, aunque lo crean o tengan buenas intenciones,
cuando me miran en silencio esperando soluciones,
cuando dicen, tranquilo tú puedes, SIEMPRE puedes,
¿por qué? porque eres tú, con eso basta, SIEMPRE lo haces.

¿¡Por qué?! ¿¡Por qué!? Joder y si no puedo,
si no tengo la respuesta, si lo único que tengo es miedo
¿no tengo derecho a no saberlo, a no conseguirlo?¿ derrumbarme no es una opción?
no pasa nada dicen, trabaja mejor bajo presión.

Me miran como si llevara un disfraz de superhéroe, indestructible, valiente,
y lo único que llevo puesto es el miedo a no ser suficiente...
me gustaría ser el color de sus pupilas, para entender por qué me mira
como si fuera el hogar donde querer pasar toda la vida.

Y si duele lo que escribo es por sincero,
por impregnar con mi alma la tinta de este lapicero,
por tallar versos en mi corazón, arrancármelo, dártelo como testigo,
para cuando yo hablé, él te diga que miento, que no soy todo lo que digo.

Porque si al final vas a querer, quiereme por lo que soy,
por mis contradicciones, errores y , manias y defectos, por lo que siento,
porque si me vas a odiar, ódiamepor lo que soy,
Por ser fiel a mis principios, por ser yo, porque al menos lo intento.




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